Gone Home

Gone Home es un puzle que desde el principio está perfectamente ordenado, encajado, y puesto con orgullo sobre la mesa del salón. No te exige que muevas ninguna pieza. Lo único que hace es pedirte amablemente que observes con mucho cuidado cada una de ellas —porque están llenas de detalles— antes de alejarte y echar un vistazo al dibujo completo. Y el dibujo completo, como cada una de las piezas por separado, es precioso y está lleno de matices.

Entras a una mansión pero en lugar de zombies te encuentras con notas por todos lados. Mediante estas notas vas descubriendo una bonita narrativa fragmentada sobre lo que le ha pasado a cada miembro de la familia en tu ausencia, con especial atención a la hermana. Es un walking simulator pero no por ello hay que denostarlo. Destaco el detalle gráfico de la casa para ser de 2013. Corto y al grano (se puede terminar directamente en 1 minuto). Una partida normal dura unas 3 horas (yo duré 5 horas porque me gusta mucho mirar cada detalle y porque saqué algunos logros). Contiene elementos LGBT pero no me ha parecido woke.

Buen juego que, salvando las distancias, me recuerda bastante a la obra maestra de What Remains of Edith Finch (juego que saldría unos pocos años más tarde que este Gone home, lo cual le da puntos extra al que ahora nos ocupa).
Se trata de uno de los primeros walking simulators modernos, con todo lo bueno y lo malo que eso supone para cada persona. Como suele ser habitual, en estos casos cuenta con una narrativa profunda y que te toca la patata. Por contra el juego es lento y poco interactivo, ya que el 99% del tiempo estás caminando, leyendo cartas y notas y manoseando objetos por si tienen alguna utilidad de cara a sacar algún extra, ya que el camino para completar la historia principal es bastante lineal y claro.
A mi me ha gustado el juego, pero está claro que no es para todo el mundo.

La historia nos mete en el pellejo de una chica que llega a la casa familiar tras un largo periodo de viaje por Europa, pero al llegar a ella se la encuentra vacía y tendremos que ir recopilando pistas de lo que ha ocurrido durante los meses que hemos estado fuera. Para ello iremos recorriendo la casa, donde encontraremos notas, cartas y demás documentos que nos irán revelando anotaciones del diario de nuestra hermana menor adolescente, rebelde y con las hormonas alborotadas.

Por último comentar que este juego, al igual que otros de esta misma compañía han recibido en los últimos años un injustificado hate debido a denuncias vertidas sobre el que fuera director creativo de la misma, lo cual no creo que sea justo a la hora de valorar la calidad de un proyecto

Gone Home es un juego de exploración que nos pone en la piel de Katie, una chica que al volver a casa tras un año fuera se encuentra su casa vacía.

Tendremos que movernos a través de esta enorme mansión buscando indicios para descubrir qué ha pasado y por qué no están allí ni tus padres ni tu hermana.

Un juego con una atmósfera que te mantendrá en tensión, aunque puedo asegurarte que el juego no trata de asustarte ni tiene "jumpscares". Aun así, el mal rollo que se genera en el ambiente y al leer las diferentes notas que irás encontrando por la casa te pondrá la piel de gallina.

La trama habrá a quién le llegue al alma, a quién le parezca indiferente (yo estoy más en este punto) y a quién le parezca malísima. En mi opinión, hay mucha "paja" entre los documentos que encuentras que "alargan el juego" sin ninguna utilidad práctica. Al límite de ser RECOMENDADO.

BUEN JUEGO AMBIENTAL
Aunque sabía que no era un juego de terror, me esperaba algo más. La trama secreta no me llamó la atención, y el hecho de que el audio esté solo en inglés lo empeoró. Entiendo que sea un juego indie y que tal vez no haya presupuesto para doblarlo a otros idiomas, pero también afecta que los subtítulos vayan demasiado lento.

Eso sí, la sensación de estar explorando una casa solitaria, solo acompañado por su buen sonido ambiental y sintiendo kenopsia al recorrer los pasillos y rincones oscuros fue una experiencia que me gustó mucho.

Gone Home no es para todos, especialmente si no eres de los jugadores a los que les gusta explorar y leer.

Joyita oculta, muy recomendado para cualquiera que esté dispuesto a escuchar una buena historia. Hay más de veinte notas a lo largo del juego. Por favor, buscadlas todas. Tampoco tengáis miedo de usar una guía si se os complica la cosa, realmente merece la pena.

Bueno, no sabia ni de que trataba el juego. Me esperaba una historia de terror y me encontré con una historia de lesbianas. Que se yo, esta bueno, pero realmente no es un juego de terror para nada, así que si esperan eso, no lo jueguen con eso en mente.